Hacía veinte años el capitolio había sido destruido, hacía
veinte años que los juegos habían sido destruidos y ya nadie moría de hambre.
Veinte años habían pasado desde la muerte de tantos seres queridos; Cinna,
Prim, Finnick… pero con el tiempo, hasta las peores heridas son capaces de
sanar. Todo había acabado, todo lo malo se había ido. La vida daba esperanzas
de un futuro mejor, un futuro sin capitolio, sin miedo, sin juegos… Cinco años
exactamente tardó Peeta en convencer a Katniss para tener hijos, hasta que lo
logró. La primera, fue una niña. Una hermosa niña de hermosos ojos azules como
Peeta y largo cabello negro como Katniss. Diez años después, nació William
(Will).
Hacía casi trece años que Katniss y Gale no se veían, y las
cosas iban iguales, Gale estaba en el dos y Katniss en el doce, nunca se veían.
Un día, Katniss fue a dar una de sus giras de Sinsajo con todos sus familiares
(incluso su madre) por todo Panem, cuando visitó el distrito dos, vio a Gale y
le sonrío inmediatamente, él se fue de ahí de inmediato. Katniss y su familia se quedarían en el distrito 2
durante una semana.
Un día, la madre de Katniss salió a comprar algo para su
pequeña nieta, en el camino, se encontró con Gale. “¿Sabes? Ella te necesita”
Le dijo.
“No, ella no me necesita, sólo necesita estar alejada de mí.
Verme le causaría mucho dolor. Y no quiero lastimar más a Catnip.” Dijo Gale.
“Vamos Gale, Katniss no te odia por lo que sucedió hace tantos años. Está solo,
enojada, confundida, te necesita Gale. No te alejes de ella.”
“Sí no me odia, ¿Por qué lo aparenta?” Le pregunto. “Las
apariencias engañan Gale, detrás de un “te odio” hay un “te necesito” Le dijo.
Finalmente, la madre de Katniss convenció a Gale y ambos fueron al Edificio de
Justicia del distrito 2, lugar donde estarían Katniss y su familia. A Katniss
le fascino ver nuevamente a Gale, cuando le confesó que tenía una hija, Gale
entristeció, pero se alegró porque la felicidad de Catnip era lo que más le
importaba en ese entonces, cuando le dijo que estaba esperando un hijo, él
solamente contesto:
-Me alegra que seas feliz Catnip.
Habían pasado cinco desde la muerte de tanta gente. Pero
también habían pasado cinco años desde que para Katniss lo era todo felicidad,
felicidad que le daba su amada hija. Una pequeña niña cuyas sonrisas hacían que
Katniss sonriera también, cuyos hermosos ojos azules llenos de vida y esperanza
le recordaban a Katniss que ahora todo era diferente, que los juegos del hambre
se habían ido y que jamás volverían a asustarla. Al sentirla dentro de ella,
Katniss tenía miedo, miedo que pudo ser curado solamente cuando por fin sostuvo
a su pequeña en brazos. Para Katniss todo cambio cuando su hija nació, la amaba
más que a nada en el mundo, la niña era dulce, hermosa, amable y encantadora,
todo el distrito la quería, era una pequeña cuyas sonrisas hacían sonreír a
Katniss hasta en los días más tristes en los que las pesadillas la
atormentaban. Sí, sin duda aquella pequeña a la que todo aquel que la conocía
le era imposible no quererla cambió por completo la vida de Katniss, porque
ella hizo que Katniss sintiera que podía vivir, vivir sin miedos, solo con
felicidad. Katniss no imaginaba una vida mejor, al menos hasta que su segundo
hijo, Will llegará al mundo diez años después del nacimiento de su primera
pequeña hija, quien ya tenía diez añitos. Todos los recuerdos y momentos
felices que Katniss tenía, serían recordados en aquel libro al que ella llamaba
“El Libro De Los Recuerdos” libro donde cada recuerdo atesorado que tenía Katniss
era guardado con amor. Sin duda esos años fueron los mejores años que Katniss
pudo haber vivido.
Hacía veinte años que la vida era una hermosa vida llena de
hermosos recuerdos. La tristeza se había ido, el miedo también, y los juegos
del hambre habían terminado por completo, ahora todo era felicidad, al menos,
hasta el día en que los televisores de Panem, se encendieron para dar una
triste noticia.
-Bienvenidos, bienvenidos amigos a la televisión del nuevo
capitolio. O, algo así. ¿Qué? ¿Creyeron habernos acabado por completo? Que
equivocados estaban. Me pregunto cómo la habrán pasado durante estos veinte
años sin juegos. ¿Tú qué crees tú Asrield?
-Bueno, hayan sido esos tiempos buenos o malos se acabó.
Ojala esperen con tantas ansías como yo estos juegos, porque dentro de una
semana, veintiséis niños, dos de cada distrito irán a las arenas. Oh, pero no
serán niños cualesquiera sino ¡hijos de vencedores amigos!
-Ahahaha, me apostaría los calcetines a que eso no se lo
esperaban. Con estos juegos borraremos los antiguos del mapa, nuevos peligros,
menos ayudas, todo será más largo y doloroso. Me encanta sin duda.
-Bueno, espero que nuestros tributos sepan cómo sobrevivir
sin ayudas porque no las tendrán. Como sabrán, nuestro querido capitolio no
tiene habitantes, por lo que no hay ayudas, y tampoco nos molestamos en
conseguirles mentores, queremos que estos juegos sean más peligrosos, largos, e
incluso más dolorosos.
-Bueno, ¿Qué les parece conocer los nombres de nuestros
tributos? Del distrito 1, Imerald y Jasper; del distrito 2, Soren y Tristan;
del distrito 3, Rosalie y Erik; del distrito 4, Ailar y… uh, creo que este
chico será adorado por todos ¡Finnick!; del distrito 5, Cristel y Gael; del
distrito 6, Moira y Conner; del distrito 7, Peter y Vyolett; del distrito 8,
Lillen y Aidan; del distrito 9, Zafrina y Jake; del distrito 10, Sawyer y
Amaril; del distrito 11, Simon y Quiara; del distrito 12… bueno, nunca fue
nuestra intención llevar hermanos a las arenas, pero, el 12 no nos deja de otra
así que, del distrito 12, Kayla y Will Mellark; y, finalmente, del distrito 13,
Liam y Kaethe.
-Bueno, siendo eso todo, ¡Felices juegos del hambre! ¡Y que
la suerte, este siempre, siempre de su lado!-. Entonces el televisor se apaga.
Katniss rompe en llanto de inmediato. Todo por lo que había
luchado, había sido destruido en unos pocos años, sentía en ese momento que se
derrumbaba por completo, le habían quitado a lo que más amaba en su vida, a sus
hijos, y eso era una herida que ni el tiempo se podía curar.
-Katniss, Katniss. Escúchame, los sacaremos con vida de ahí
a cualquier costo ¿entiendes? Haremos lo que sea para sacarlos de ahí.
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